Los límites espaciales de Sawabona se difuminan con un entorno privilegiado como es la huerta de Alboraya. Desde el proyecto creemos en la importancia de estar en contacto con el mundo que nos rodea y sus posibilidades, trazando conexiones al exterior:
Salidas más informales, cotidianas, de inmersión en la huerta, en el vecindario y los recursos de Alboraia (autobús, biblioteca, mercado, parques, playa).
Salidas más formales de acceso a al cultura (visita a museos, exposiciones, tranvía, metro, etc.)